Valores

Primero el amor

Por Luisa Portal de Aguilar

De repente en este mundo aprendemos a sobrevivir, más no a amar; y esto nos limita a no poder ver más allá y menos cuando se nos presenta el verdadero amor, como el de traer vida en nuestro cuerpo.

Esa pequeña vida que nos dará una razón para luchar en el mundo, que nos ayudará a ser cada día una mejor persona… Esta es la verdadera forma de sobrevivir luchando por la vida de este pequeño ser, indefenso, que podría ser un cambio en el Mundo.

 

En estos tiempos se nos enseña de todo, menos a luchar por la vida. Se nos enseña a cometer un asesinato, y vivir condenado por siempre a este delito. Pensar en lo que podría haber sido y no fue, la ansiedad de conocer nuestro propio fruto, el querer regresar el tiempo y poder pedir perdón una y otra vez por haber quitado la vida a quien merecía nacer, agonía diaria por no haber amado a tu propia creación, a tu propio hijo.

Como padres, antes de enseñar a ser profesional, a ser maduro, a aprender a vivir la sexualidad en los tiempos correctos, enseñemos a amar la vida, a que sí queremos demostrar el Amor; que sea el verdadero amor y a querernos tanto como para cuidar nuestras decisiones, para prepararnos realmente para ese momento de ser madres o padres, independientemente la circunstancia que sea.

La vida de un hijo no es una desgracia, ni nos arruinará la vida, sino que nos la iluminará, nos hará regresar al camino correcto, nos convertirá en mejores hijos, en mejores personas, en unos luchadores.

Traer vida es el mayor logro del reflejo del Amor y lucha que un humano puede realizar, por eso no se puede jugar a amar, la vida no es un juego, no es un capricho o un experimento.

Enseñemos primero a amar…